La omnicanalidad es un concepto que va de la mano con el proceso de viaje del consumidor, un camino que une a un productor con su consumidor y que tiene alrededor de cinco pasos, comenzando con la conciencia de la necesidad del producto o servicio, hasta la compra, y terminando con la lealtad del cliente.Para conseguir una estrategia omnicanal eficaz es necesario conocer en profundidad, cada uno de los canales a tu disposición y los objetivos de referencia dentro de esos canales, y jugar con estos factores teniendo siempre en cuenta los valores de la marca.¿Cuáles son los canales de comunicación con el cliente?
Redes sociales: uno de los canales más directos y sensibles del mundo de la comunicación corporativa.
Sitio web: Un sitio web es más que una tarjeta de presentación, es el hogar de la marca. Cada pequeño detalle dice algo sobre la empresa, ya sea positivo o negativo.
Correo electrónico: es un gran canal para enviar no solo boletines sino también comunicaciones oficiales, proyectos y técnicas de la marca.
Canales offline: son los canales más tradicionales (carteles, escaparates, folletos, volantes, pero también gadgets y similares). Los canales offline son una gran oportunidad para tu marca, aquí se vuelve físico, no como producto sino como mensaje.
Una estrategia de comunicación coherente con la marca y público el objetivo conecta sin problemas los canales que operan en el recorrido del consumidor obteniendo una estrategia eficaz